Los datos del Producto Interno Bruto (PIB) que indican una estagflación han desencadenado una turbulencia en el mercado y han aplastado las esperanzas de un recorte de tasas. La estagflación, un fenómeno económico caracterizado por un crecimiento económico lento (o estancamiento) y una inflación alta, es la némesis de un banquero central.
El crecimiento más débil de lo esperado y los precios más altos de lo esperado son el ejemplo perfecto de una estagflación. Como resultado, las expectativas de recorte de tasas han caído cerca de los mínimos del ciclo para 2024 y 2025.
Los rendimientos del Tesoro están aumentando, liderados por el extremo corto. El rendimiento a 2 años ha vuelto a superar el 5.00%. En respuesta a estos datos, las acciones están sufriendo.
Las materias primas parecen menos ansiosas, con el petróleo deslizándose un poco y el oro subiendo modestamente incluso con el dólar en alza. Sin embargo, las criptomonedas están bajando.
Estos datos de PIB estagflacionarios han dejado a los inversores y al mercado en general muy insatisfechos. La pregunta que queda en el aire es: ¿Cuándo será la conferencia de prensa de Biden para confirmar que habrá recortes de tasas este año?.