Durante gran parte del último año, hemos estado insistiendo en dos hechos muy simples: no solo el mercado laboral de EE. UU. ha sido sorprendentemente débil, con la mayoría de los empleos “ganados” en 2023 y destinados a señalar cuán fuerte ha sido la “recuperación” de Biden, a punto de ser revisados (como admiten primero la Reserva Federal de Filadelfia y ahora Bloomberg), sino que, más impactante, todo el crecimiento del empleo en los últimos años ha ido a parar a inmigrantes ilegales.
Hemos señalado esto hace más de un año, y desde entonces lo hemos repetido rutinariamente. La debilidad del mercado laboral de EE. UU. y el crecimiento del empleo entre los inmigrantes ilegales son dos realidades que han sacudido a Wall Street y han generado un gran interés entre los inversores y analistas.
En resumen, la combinación de un mercado laboral débil y el crecimiento del empleo entre los inmigrantes ilegales ha llevado a un shock económico, a pesar de los esfuerzos por impulsar la recuperación.